Cuando uno era niño y te preguntaban, ¿y usted que quiere ser cuando grande?, uno dejaba de jugar, miraba al horizonte y respondía “Astronauta” o “Bailarina”. No faltaba el niñito que decía “Micrero” o la niñita que quería ser “Nana” y la mamá salía por atrás diciendo “hay la Catita que está loca”, muerta de vergüenza. Cuando éramos niños pensábamos que podíamos hacer cualquier cosa y nos sentíamos capaces de todo.
Hasta los 15 años quise ser doctora, mi abuelo era doctor y mi tío lo es, él siempre me incentivaba, me regaló su microscopio y yo me dedicaba los sábados en la tarde a buscar bichos y hojas para verlos en este súper aparato. La cosa es que nunca fui de las mateas del curso, en realidad me iba mal, especialmente en matemáticas, química y física. La biología me encantaba, me la tomaba con mucha imaginación y más de una vez terminé afuera de la sala por decir que una molécula parecía un pac-man. En un colegio sólo de mujeres el pobre profesor trataba de hacer de todo para que nos gustara la materia y todavía tengo la imagen de mis compañeras viendo cómo les saldrían los hijos con el tipejo que les gustaba, cuando pasamos genética, “rubio de ojos cafés, moreno de ojos negros etc”.
En el colegio lapidaron poco a poco mi sueño de ser doctora, las mateas del curso eran las que podían aspirar a estudiar esa
carrera y la otra calaña, las que nos sentábamos atrás y participábamos en cuanta actividad extra programática hubiese, tenía que ver en qué
carrera encajaba. Finalmente descubrí que me gustaba escribir, leer y grabar vídeos, entonces mmm periodismo!!! y así terminé siendo una periodista o eso creo. Años después me di cuenta de que podría haber estudiado lo que yo quisiera, que las personas te van matando los sueños y haciéndote creer que como no eres buena para tal cosa no puedes estudiar algo que esté relacionado en lo más mínimo con eso, lo cual es una completa mentiraaa!!
Ya que no pude seguir mi carrera soñada, que en verdad no sé si estoy muy arrepentida porque estaría estudiando hasta el día de hoy, decidí que sí voy a alcanzar “el trabajo perfecto”. Cuando hablo del trabajo perfecto me refiero a ese que te permite trabajar desde la casa, no tener horarios, hacer lo que más te gusta, ganar bien y ser tu propio jefe.
Bueno además están las que creo hoy son las 3 mejores pegas del mundo!!!, pero que son un poco difíciles de realizar a estas alturas del partido; una es ser futbolista del Barcelona, la otra inventar algo como Facebook y por último ser estrella de rock.
Pretendo llegar a tener algún día la pega soñada, quizás no con las 5 características que nombré, pero con por lo menos 3 de ellas. Nunca es tarde para empezar un negocio,
Ray-Ban RB3030, postular a un nuevo trabajo o jugárselas por un proyecto soñado.
Atte: La Pata Pelá